CUIDANDO CON CUIDADO

"Cuidando con cuidado" nace como herramienta de ayuda para alcanzar una forma correcta de alimentación adaptada a los nuevos tiempos. Desde aquí dedicaré algunas de las informaciones que he ido recopilando a lo largo de mi vida académica; lecturas, estudios científicos, publicaciones, pero sobretodo desde la experiencia personal, que es sin duda una fuente inacabable de sabiduría.
Os animo a todos a empezar a cuidaros con cuidado, como os merecéis.

Bienvenidos a otra dimensión de la salud y de los cuidados.

viernes

EL JARDÍN DE LA SOJA

La bebida de soja lleva siendo objeto de estudio en los últimos años, muchos son los defensores y muchos más los estudios que determinan los beneficios del consumo de esta bebida, sin embargo, también hay estudios que demuestran lo contrario. Muchos datos a favor y algunos en contra son los que se pueden encontrar al respecto de este producto.

No existe en la naturaleza ningún nutriente que siente a todo el mundo igual, cada cuerpo asimila y metaboliza los nutrientes de forma diferente, y en el caso de la soja sucede lo mismo. En mi caso, como vegetariano desde hace muchos años, comencé utilizando la soja y sus múltiples derivados como una forma de incrementar el aporte en aminoácidos y ácidos grasos esenciales, con el tiempo y por la simple experiencia personal, fui retirándolo hasta la eliminación total  a excepción del miso. Las digestiones eran largas, tomada por la noche hacia que el sueño no fuese óptimo, y combinado con otros alimentos se hacia más pesada.

Una de las afirmaciones mas escuchadas sobre la soja, es que tiene un alto valor nutritivo, y es cierto ya que en comparación con otros vegetales, tiene mas proporción de aminoácidos. Sin embargo, como os he comentado en otras ocasiones, lo importante no es lo que posea cada alimento, sino la capacidad de nuestro organismo para asimilarlo. La soja posee inhibidores de enzimas digestivos que hace que se dificulte la asimilación de esas proteínas. Además tiene ácido fitico que hace que se bloqué la absorción del calcio, magnesio, cobre, hierro y zinc. Es deficitaria de B12, hierro, tiamina y B1.

Otra de las afirmaciones para alabar el producto, es el contenido en Omega 3, efectivamente si fuera una leche cruda sería rica en este ácido graso tan apreciado por nosotros, sin embargo, en la elaboración de la leche de soja, se somete al producto a elevadas temperaturas, y los Omega 3 son altamente sensibles al calor, un simple cocido hace que casi la totalidad de Omegas queden destruidos. Si poseen Omega 3 es porque han sido enriquecidas posteriormente tras haber dañado los originales.

Otro de los supuestos puntos positivos es que tiene un gran beneficio hormonal. Tiene una sustancia quimica similar a los estrogenos (hormonas femeninas) pero esto no tiene porque ser positivo, ya que no es beneficioso para todo el mundo. Si se producen modificaciones en el orden hormonal, se puede llevar al organismo a grades desajustes. Estudios recientes realizados a varones, ponen de manifiesto que reduce el número de espermatozoides.

Es un alimento pesado, que densifica el organismo. Las digestiones son largas, no podemos olvidar que es una legumbre, la mas proteica de todas y no todo el mundo es capaz de digerirla correctamente.

A todo esto habría que hay que tener en cuenta que una gran parte de la soja que se consume actualmente es transgénica.

La deforestación a causa de los cultivos de soja es otra de las razones por las que debemos de valorar tomarla o no. Parte de las sabanas y selvas tropicales, están cediendo su espacio al cultivo de soja, siendo uno de los peligros a los que se enfrenta nuestro medio ambiente. En realidad el mayor peso comercial de la soja lo tiene como alimento para ganado y combustible, pero si añadimos la creciente demanda para el consumo humano se hace insostenible para nuestro planeta.



Evidentemente tiene aspectos positivos: Tiene lecitina que evita problemas cardiacos y limpia las arterias, es rica en vitamina K que beneficia la coagulación sanguínea, es rica en magnesio, rica en vitaminas del grupo B sobretodo la B6... Sin embargo, desde mi punto de vista no es un alimento óptimo, al menos para tomar con regularidad o a diario. 
Por los perjuicios que nos puede causar y por los efectos que esta teniendo en el aspecto ambiental, hace que no sea uno de mis básicos en mi nevera.

HABLEMOS DE LA LECHE

Uno de los aspectos que se encuentran en duda por el interés mediático que esta teniendo en los últimos años, es sobre el consumo de leche. Surgen informaciones desfavorables sobre esta bebida que vamos a pasar a analizar.

La leche animal y concretamente la de vaca, tiene un alto valor proteico. Cada litro de leche cuenta con 34g de proteína, 49g de hidratos de carbono y 35g de lípidos. Además posee cantidades de minerales y vitaminas como calcio, fósforo, potasio, sodio, tiamina, riboflavina, niacina, acido ascórbico y vitamina A.

Pero como siempre, lo importante de los nutrientes no es la cantidad que contenga cada alimento, sino qué capacidad tiene nuestro cuerpo de asimilar esos nutrientes y si son o no beneficiosos.


La nutrición y medicina clásica, durante años han aconsejado tomar al menos 2 vasos de leche al día para asegurarse la dosis de calcio necesaria, en realidad esto era cierto porque la cantidad de calcio que hay en la leche animal cubriría nuestras necesidades, sin embargo, la realidad es otra. El grupo de nutrientes que contiene la leche, hace que el calcio no sea asimilado por nuestro cuerpo, es decir, el calcio que lleva la leche, pasaría por nuestro tracto digestivo sin pena ni gloría, pero no solo eso. Actualmente contamos con numerosos estudios que dejan claro que el consumo de leche no solo es ineficaz para cubrir las necesidades de calcio, sino que el tomar leche, descalcificaría los huesos y por tanto aumentaría la necesidad de calcio. Es decir, tomar leche nos descalcifica ( en este caso nuestra abuela no tenía razón).

Por otro lado, la enzima necesaria para asimilar la lactosa es la lactasa, pues bien, a medida que crecemos esa enzima va decreciendo en nuestro organismo, por lo que cualquier adulto no va a tener capacidad para asimilar la lactosa. Podríamos decir que es un alimento que tiene gran toxicidad para los adultos. En el caso de las mujeres es aún mas pronunciado. La escuela de Medicina de Hardvard demostró ya hace años, que la leche fresca de vaca produce en las mujeres un mayor riesgo de contraer cáncer de ovarios. Además la galactosa (azúcar de la leche) es tóxica para los ovarios, inhibe la fertilidad y puede causar degeneración en el feto.

Las actuales leches sin lactosa tampoco son la panacea, con la eliminación de la lactosa eliminamos el contenido en calcio en un 50% y mantenemos la presencia de la galactosa y el desequilibrio entre calcio y fósforo se acentúa.

Existen una relación directa entre el consumo de lácteos y diferentes patologías del aparato respiratorio y oidos. Personas que padecían de sinusitis, la han borrado de sus vidas con el simple hecho de dejar de beber leche animal. El consumo de lácteos, potenciaría los problemas circulatorios, inmunodepresión, diabetes juvenil, enfermedades otorrinolaringológicas, asma, mucosidades en órganos genitales femeninos y aparato auditivo.

En realidad no necesitaríamos para nada tomar leche, el calcio es uno de los minerales mas presentes en los vegetales, verduras como la col, brecol o sésamo son una gran fuente de calcio, sana, asimilable y beneficiosa.

En China, país donde la cultura no fomenta la ingesta de leche no se producía osteoporosis, los chinos que introdujeron la leche a su dieta son premiados con un aumento de osteoporosis, algo paradójico teniendo en cuenta que los chinos que consumen leche, toman cuatro veces  más calcio que los que no la toman (se cumple la regla de que menos es mas).

Para las personas que no pueden retirar de su alimentación la leche debido a la costumbre de beber un liquido blando y dulce, mi recomendación es pasarse a las leches vegetales como la de almendras, avena, avellanas, arroz, etc. siendo poco partidario de la leche de soja.







Son muchos los motivos que nos deben de llevar a abandonar de forma radical e inmediata el consumo de leche de nuestras dietas, no obstante, además de lo anteriormente expuesto, consumir leche animal fomenta la explotación de animales en granjas industriales y es una acción poco ecológica ya que para consumir un litro de leche necesitamos invertir además el grano que hay que suministrar a las vacas durante toda su vida. ¿Las ventajas de consumir leche animal? No se me ocurren...